Prostitución en la guerra (1939-1945)

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 El sexo y las enfermedades de transmisión sexual durante la Segunda Guerra


Ejércitos, prostitutas y enfermedades de transmisión sexual es un tándem que desde hace tiempo están juntos y durante la segunda guerra mundial no fue la excepción pero perder tropas entrenadas por una enfermedad venérea era algo totalmente inaceptable en tiempos de guerra así que los distintos ejércitos tomaron una serie de medidas para combatirlo.


Para empezar los alemanes utilizaban un extenso sistema de prostíbulos de campaña (manejados por el ejército o particulares según el frente) severamente regulados por los médicos de sanidad militar adonde las tropas acudían de forma ordenada y al entrar cada soldado presentaba su tarjeta sanitaria y recibía un frasco de antiséptico que debía entregar a la prostituta que elegía y al llegar al cuarto esta echaba el antiséptico tanto en su sexo como en el del soldado y luego de eso firmaba el frasco que al salir el soldado debía entregar, firmado, al oficial medico presente en el burdel que a cambio sellaba su tarjeta, típica minuciosidad burocrática germana, en lugares como la URSS las esclavas sexuales infectadas eran eliminadas para no gastar dinero en tratamientos médicos, en Francia donde más de 100.000 chicas trabajaron en prostíbulos privados regulados y controlados por la sanidad del ejército las pocas infectadas recibían tratamiento.


En las fuerzas armadas estadounidenses hacía rato se luchaba contra las ETS sin mucho éxito en 1941 en 1 millón de reclutas se encontraron 83.000 casos de enfermedades venéreas, en la base de Pearl Habor se dieron casos severos de sífilis entre la marinería y los almirantes puritanos luego de realizar pesquisas llegaron a la conclusión que la sífilis se contagiaba por los picaportes en los baños por lo que había ordenado que los baños no tuvieran picaportes…..
Más adelante durante la guerra se realizaron campañas para exigir a los soldados un sacrificio por la causa, argumentando que en casa los esperaban sus familias y la vergüenza que pasarían al ser infectados, las prostitutas fueron comparadas con agentes nazis que contagiaban a las tropas y las enfermedades con ataques de agentes del Eje, todo en vano ni preservativos ni amenazas pudieron evitar las infecciones (dado que a las tropas se les daban 4 condones por mes considerado a toda luces insuficiente en hombre jóvenes) en las tropas hasta que llego la penicilina.



En el Japón se sabía que las tropas necesitaban sexo tanto como alimento así que era práctica regular proporcionarles “mujeres de consuelo” o “mujeres de solaz” como las llamaban, al menos una vez antes de un combate, todas las prostitutas eran severamente controladas por los oficiales médicos del ejército imperial y como no era posible dado el número de tropas darles chicas japonesas se recurría a raptar chicas chinas o coreanas que por supuesto pasaban por los controles médicos para evitar contagios, el promedio de clientes de estas mujeres eran de 100 clientes diarios y cada soldado tenía 3 minutos cada uno para hacer sus cosas (J) , entre el 75% el 95% de estas mujeres fueron muertas durante la guerra, los niveles de enfermedades venéreas en el ejército japonés fue bajo o no se registró.



En la URSS los soldados obtenían mujeres como podían ya fuera mediante seducción, la entrega de raciones a las camaradas o a la fuerza, la prostitución comercial o estatal había sido abolida en la URSS aunque había por todos lados (la libre empresa), la violación de mujeres enemigas era considerado como en todos los pueblos asiáticos un derecho de los soldados y no era sancionada pero no hay registro de enfermedades de ese tipo en las tropas aunque de seguro existieron.









En tiempos de guerra, los conceptos de la moralidad de la prostitución cambiaron radicalmente. La prostitución fue evaluada a través de cristales de diferentes colores.
La industria de la prostitución, una actividad potencial multimillonaria en tiempos de guerra, fue apoyada por instituciones que tradicionalmente se oponían a ella el ejército, la policía y otras agencias gubernamentales dedicaron dinero y recursos al reclutamiento, regulación y mantenimiento de la prostitución.
Una de las principales características en tiempos de guerra, particularmente durante la Segunda Guerra Mundial, según Alice Yun Chai, que investigó la prostitución en el ejército japonés, fue que tanto los reclutadores como los receptores de los servicios eran la clase dominante, los militares.

Pero la práctica de la prostitución y especialmente su organización no era privilegio de los japoneses todos los ejércitos del mundo controlaban y regulaban de alguna manera las actividades sexuales de las tropas para evitar que se vieran afectadas la salud, la disciplina y la moral, tanto en los propios países como en los territorios ocupados. Los que no sufrieron las consecuencias y causaron muchos daños en los países ocupados por sus tropas.
Durante la Segunda Guerra Mundial las fuerzas armadas de los países aliados, así como las del Eje, se aseguraron de que la prostitución estuviera muy bien controlada, pero había una diferencia en Japón, producto de la cultura e idiosincrasia del pueblo japonés de la década de 1940.
En 1945, antes de la llegada de las fuerzas de ocupación, el gobierno japonés organizó el ejercicio de la prostitución voluntaria controlada, para entretener a las fuerzas de ocupación norteamericanas, en principio para prevenir la violación de mujeres japonesas.
Sin embargo, la violación no se impide en el Japón ni en ninguno de los países ocupados, a menos que el ejército de ocupación haga caso omiso del problema o simplemente lo permita. En Crímenes de Guerra, José A. Llorens Borrás dice:

"El pisoteo de mujeres fue la consecuencia más odiosa de la ocupación aliada" Los rusos, a medida que avanzaban, iban a cazar mujeres, y dondequiera que entraban, violaban a tantas como podían.
Pero los otros ejércitos aliados también cometieron el mismo crimen. Con ellos había gente de color, cuyo salvajismo racial no fue interrumpido muchas veces aunque no fueron sólo estos soldados los que cometieron este odioso ultraje.

Citamos sólo unos pocos casos.
"En la víspera del Domingo de Ramos, el 24 de marzo de 1945, los rusos ocuparon Neiße, en Alta Silesia, una ciudad de unos cuarenta mil habitantes. Alrededor de veinte monjas, doscientas monjas para cuidar a los ancianos y enfermos, y cerca de dos mil vecinos se habrían quedado allí.
A pesar del asedio y los ocho días de bombardeos, Neisse no fue muy destruido.

De los edificios de valor artístico, sólo uno fue destruido por un incendio que provocó un bombardeo, la famosa iglesia de Santiago (São Jakob), en la tarde del 21 de marzo.
"El Ejército ruso invadió la ciudad como un torrente y los soldados penetraron por todas partes. En la casa donde vivían los sacerdotes, todos los relojes y objetos de valor fueron retirados de los sacerdotes y monjas.
Lanzando palabras amenazantes, pidieron el vino de la misa y saquearon toda la casa. Ni siquiera respetaron el altar, situado en el sótano, donde se concluyó la última misa. Llenos de codicia, se apoderaron de los edificios y de los cálices. Las niñas, mujeres y monjas fueron violadas continuamente.
Los soldados rojos, con los oficiales delante de ellos, formaron largas filas ante sus víctimas. Ya la primera noche violaron a muchas de ellas hasta cincuenta veces. Las monjas que se defendieron fueron asesinadas o alcanzaron un agotamiento físico tal que no tuvieron fuerzas para seguir resistiendo.
Arrojaron a las monjas al suelo, las pisotearon sin piedad, las golpearon con sus armas en la cabeza o en la cara, hasta que, llenas de sangre, mutiladas e hinchadas, quedaron en el suelo sin conocimiento y, en ese estado, fueron víctimas de la vehemencia de los rusos, cuya brutalidad era incomprensible para nosotros. Las mismas escenas se repitieron en hospitales y residencias de ancianos y otros establecimientos similares.
Incluso las monjas de 70 y 80 años, enfermas y paralizadas en la cama, fueron violadas y maltratadas por estos hombres brutales. No en secreto, sino en presencia de todos, incluso en plazas públicas e iglesias, se vieron expuestos a las fuerzas más brutales: madres a los ojos de sus hijos, niñas a los ojos de sus hermanos, monjas a los ojos de los jóvenes, ¡incluso cuando estaban a punto de morir o ya estaban muertos!.

Los sacerdotes que trataron de defender a las monjas fueron removidos violentamente, amenazándolas con la muerte. Quemaron en la ciudad, casa por casa, calles enteras. Primero se quemaron los sótanos, señal de la intención con la que habían quemado las casas, tal y como aprendimos de los testigos.
Un asilo de ancianos dirigido por monjas fue incendiado desde el sótano, de modo que casi todos los solicitantes de asilo murieron en las llamas y el humo.
"En abril de 1945, después de que las tropas francesas entraron en Herrenderg, más de cien mujeres fueron violadas, a menudo bajo la amenaza de disparos y en presencia de sus padres, madres o hijos. Las mujeres de 70 años fueron tratadas por igual.
"Los soldados franceses, cerca de Bruchsal, expulsaron a varias niñas de entre 14 y 17 años de un refugio antiaéreo y las violaron (4 de abril de 1945).
"En Hoya-sur-Wesser, los soldados ingleses violaron a varias mujeres jóvenes y a una mujer (mayo de 1945).
En Alemania, con la desintegración del control social en 1945, los problemas relacionados con el sexo se multiplicaron. En el valle del Rin se formaron bandas llamadas "Edelweiß". El Edelweiß es la flor "Leontopodium alpinum", que crece de forma silvestre en los Alpes, pero también proviene del Edelweiß noble (Edel) y blanco (weiß).
Los Edelweiss estaban vestidos con camisas rosas y calcetines a rayas y se dedicaban a insultar y apedrear a miembros de las Juventudes Hitlerianas, o atacar y violar a mujeres jóvenes, si no practicaban ningún tipo de vandalismo.
Todos los ejércitos que se preocupaban por mantener la prostitución bajo control, tanto en su país como en el frente de guerra, cometieron menos violaciones que los que simplemente ignoraban el problema y permitían que sus fuerzas tomaran a las poblaciones conquistadas como botín de guerra.



FUENTES: 

https://www.exordio.com/1939-1945/civilis/vdomestica/prostitucion.html
https://www.facebook.com/311655839492671/photos/a.336946910296897/430416037616650/?type=3&theater
https://es.wikipedia.org/wiki/Prost%C3%ADbulos_militares_alemanes_en_la_Segunda_Guerra_Mundial
https://www.facebook.com/photo/?fbid=493567935855982&set=pcb.1713287659021185
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Guerra Total. Grupo de estudio de historia política y militar.

Marcelo Ramon Garcia Albornoz






































Pedro Pablo Romero Soriano PS

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