Mapa de la «Operación Merkur» con los movimientos de invasión del Eje a Creta
Un obergefreiter da de beber a un burro en Creta, usando un casco británico, 1941
General Bernard Freyberg arengando a sus tropas neozelandesas en Creta
Paracaidistas alemanes pasan junto a los cuerpos sin vida de varios soldados británicos. Mayo-Junio 1941
Soldados británicos se rinden a Fallschirmjäger alemanes
«¡Sprung nach Kreta!» fue la orden emitida por Adolf Hitler cuando se materializó el plan para invadir la Isla de Creta justo después de finalizar con éxito la conquista de Grecia en la primavera de 1941. Así fue como tendría lugar una de las batallas más épicas de la campaña por el control del Mar Mediterráneo en la que intervendrían masivamente las unidades paracaidistas del Tercer Reich.
Al amanecer del 20 de Mayo de 1941, centenares de aviones alemanes entre transportes Junkers Ju 52, planeadores DFS-230 y bombarderos en picado Stukas, despegaron de los Aeródromos de Corinto, Megara, Tanagra, Topolia, Dedion, Eleusis, Falero y Rodas en Grecia. A los pocos minutos, a las 6:00 horas, los soldados neozelandeses que desayunaban junto a los apacibles olivares de Máleme, levantaron la vista hacia el cielo para distinguir un gran cúmulo de aviones que emitían un ensordecedor rugido de motores y hacían temblar el suelo. Acto seguido los Stukas descendieron en picado y soltaron sus bombas sobre los Aeropuertos de Heraklión y Máleme, provocando la destrucción entre las instalaciones. Una vez desatado el caos en tierra, los paracaidistas comenzaron a saltar a entre 90 y 120 metros de altura desde las puertas de salida de los Junkers Ju 52, abriendo las cintas extractoras de los paracaídas y dejando el cielo atestado de campanas de colores.
Al igual que les había sucedido a los Aliados en Noruega, Dunkerque y Grecia, la campaña de Creta supuso una nueva humillación y retirada para el Imperio Británico dentro del marco de la Segunda Guerra Mundial. A la pérdida estratégica de la Isla de Creta, sin obviar las enormes bajas sufridas por los Aliados en número de soldados y unidades navales hundidas, el dominio naval del Mediterráneo Oriental pasó aquel año 1941 a estar bajo el poder indiscutible de Alemania e Italia. Los Aliados sufrieron 23.830 bajas (15.000 británicos, 11.451 griegos, 7.100 australianos y 6.700 neozelandeses), entre los que hubo 4.123 muertos, 2.750 heridos y 17.090 prisioneros; con un material perdido de 49 tanques y 85 cañones, más 100 aviones derribados y 9 navíos hundidos (3 cruceros y 6 destructores) y 13 barcos dañados (1 portaaviones, 3 acorazados, 6 cruceros y 3 destructores). El Eje sufrió 6.028 bajas (6.000 alemanes y 28 italianos) entre 3.988 muertos (3.986 alemanes y 2 italianos) y 2.620 heridos (2.594 alemanes y 26 italianos); con un material perdido de 300 aviones abatidos y 11 motoveleros «kaiki» hundidos.
FUENTES:
https://www.facebook.com/photo?fbid=6094764637239250&set=pcb.1340582316492915
https://www.facebook.com/photo?fbid=6094764430572604&set=pcb.1340582316492915
https://www.facebook.com/photo/?fbid=6094764710572576&set=pcb.1340582316492915
Así fue la Segunda Guerra Mundial™
Claudio A Aguirre
Fuentes:
Pedro Pablo Romero Soriano PS