El Puente aéreo de Stalingrado

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Bajo una gélida ventisca, a los soldados del 6° Ejército que aún les quedan fuerzas, arrastran un trineo con suministros que obtenían del Puente aéreo

“El Sexto Ejército cree que será suministrado por la flota aérea en sus posiciones de erizo, y yo he realizado todo tipo de esfuerzos para convencerlo de que esto no se puede conseguir, ya que carecemos de los recursos de transporte necesarios”. Diario de Wolfram von Richthofen comandante de la 4°Luftflotte; encargado del puente aéreo, fechado el 21 de noviembre de 1942.
Mientras Manstein preparaba la operación "Wintergewitter"; Adolfo consultaba si era posible abastecer al 6° Ejército por aire. Al primero que consultó fue al teniente general Hans Jeschonnek, jefe del Alto Estado Mayor de la Luftwaffe, que aceptó que sería posible el abastecimiento si conseguían los aviones necesarios, e hizo referencia a éxito conseguido en la bolsa de Demyansk, al norte de Moscú en la primavera de 1942. Esto justificó la decisión de Adolfo de prohibir la retirada, olvidándose de que el 6° Ejército estaba compuesto por 250 mil tropas no por 100 mil como en Demyansk. Aparte la superioridad aérea ya no era favorable para los alemanes. La bolsa de Demyansk había necesitado un mínimo de 300 tn diarias -150 aviones diarios- y la Luftwaffe había desplegado 500 trimotores Ju 52 para ello. Para el 6° Ejército necesitaria aproximadamente 750 tn al día por lo que sería difícil para la Luftwaffe encontrar los aviones necesarios.
El staff de Jeschonnek cometió un error que iba a pesar -y mucho-. En los cáculos originales se asumió que en los contenedores de suministros de "250kg" y "1.000kg", se transportaba esa cantidad de pertrechos. El problema es que esa cantidad se refería al enganche de las bombas donde eran colocados, siendo la capacidad de 2/3 de lo indicado. Se estima que un JU-52 podía llevar 2,5 toneladas de suministro. Supongamos que todos los aviones eran JU-52, estos debían operar ininterrumpidamente día y noche.. en teoría un avión aterrizando cada 6 minutos.. para así llegar a las 700 toneladas diarias.. un disparate..

Por esto; Jeschonnek se arrepintió -y mucho- de haber informado a Hitler que era posible un suministro si los aviones de transporte estaban disponibles.
Cuando quiso informar a Hitler del error, Goering intervino.


Cuando el 6 Ejército fue rodeado y se pidió ayuda a la Luftwaffe, él vio en ello una excelente oportunidad para recuperar algo de la influencia perdida. Cuando aseguró a jefe que el puente aéreo era posible no consultó con ningún oficial, y tampoco es que estuviese muy enterado de la situación porque pasaba gran parte del tiempo en viajes de compras, vacaciones y otras actividades.

Cuando Jeschonnek le informó del error le prohibió hacer referencia de ello ante el Führer, y una vez organizado el puente aéreo se hizo a un lado y volvió a sus pasatiempos.

La actuación de Goering causó gran fricción con Zeitzler. El jefe de estado mayor del OKH no era un oficial con mucha imaginación, pero sí tenía iniciativa y carácter. El fue uno de los que más insistió en la ruptura, y en medio de una discusión con Goering, le retó a que dijese la cantidad de suministros diaria que necesitaba el 6 Ejército. Como es de esperar, Goering no tenía ni idea, por lo que Zeitzler le tuvo que dar el dato. Luego afirmó que la Luftwaffe podía suministrar esas 750 toneladas diarias. Esto causó ira en Zeitzler, que le acusó de mentiroso. Adolfo tuvo que mediar, pero Zeitzler no terminó ahí. En las siguientes semanas siguió la dieta de los soldados del 6 Ejército, perdiendo peso de manera alarmante.
Finalmente el líder alemán le tuvo que ordenar que cesase esa actitud.

La opinión de Keitel y Jodl es bastante conocida. Además ellos estaban con Adolfo cuando fue informado en el Berghof. El primero -como era de esperar- se limitó a confirmar la opinión del Führer con frases como: "El 6° Ejército debe aguantar" o "El frente del Volga se debe mantener". No por nada sus compañeros le apodaban Lakaitel (en referencia a lacayo) por su actitud servicial.
Jodl era un oficial mucho más competente, y dio su opinión con cautela. En la actual situación, el 6° Ejército estaba destinado a ser destruido, pero no se podían abandonar los territorios conquistados. Era esencial lanzar una operación de rescate. Mientras tanto, la Luftwaffe debería ayudar al 6° Ejército.

En la bolsa de Stalingrado las opiniones también eran diferentes. Pickert afirmaba sin bagajes que el puente aéreo era un suicidio, y no cesó de repetirselo a Paulus y Schmidt. Fiebig y von Richtofen también advirtieron a Paulus del peligro. Este vacilaba; por una parte sabía que las oportunidades para romper el cerco disminuían con las horas, pero no quería contradecir a Hitler.
Además, sus tropas andaban escasas de combustible y caballos -como mencione en un post anterior- y en caso de ruptura se debería abandonar a miles de heridos. Lo cierto es que Paulus comenzó a sufrir cierto agotamiento mental y su jefe de estado mayor comenzó a tomar decisiones. Schmidt era un convencido acérrimo al partido, e insistió en el suministro aéreo, a pesar de las advertencias de otros oficiales. Para facilitar el puente aéreo redujo la cantidad requería de 750 toneladas a 500, que serían en gran parte combustible y munición.

Otro de los problemas eran la cantidad de aviones y sus tripulantes.

El 23 de noviembre de 1942, el teniente general Hans-Georg von Seidel, Intendente General de la Luftwaffe, reclutó todos los Ju-52 (transporte), Ju-86 (entrenamiento, completamente inadecuado para el transporte), FW-200 y Ju-90 (reconocimiento de largo alcance), He-111 (bombardero de largo alcance) de toda unidad, estado mayor, ministerio y de la Oficina del Jefe de Entrenamiento. En el máximo esplendor la Luftwaffe reunió 600 aviones. En cuanto a la tripulación; muchos provenían de otros frentes, e incluso eran sacados de las escuelas de entrenamientos y llevados a destino.. la falta de conocimiento de la zona, como la famosa barrera meteorológica del Volga (donde el frío aire siberiano procedente de las estepas de Asia confluye con el aire húmedo y caliente del Mar Caspio y Mar Negro) o de volar en el duro clima en el que operó la misión; en algunos casos a -50°.. sumado a las deficientes y escasas pistas, y el hostigamiento soviético.. muchos aparatos y tripulación se perdieron.
Otro factor no tomado en cuenta fue la falta de aeródromos en condiciones para tal misión, aunque en la caldera había unas 7 pistas; Gumrak y Pitomnik eran los más aceptables.
En las afueras estaban los aeródromos de Tatsinskaya y Morozovskaya; ubicados a 1 hora de vuelo; y siendo estos atacados por los soviéticos en la operación Pequeño Saturno; Tatsinkaya cayó en manos soviéticas y luego fue recapturado por los alemanes. Y no hablemos cuando Pitomnik y Gumrak cayeron en manos soviéticas en enero.. y la Luftwaffe lanzó las provisiones en paracaídas.
La Luftwaffe entregó un promedio de 116 toneladas diarias a los cercados en Stalingrado; acordémonos la medida era 750 toneladas que después se bajó a 500. Hasta que Gumrak y Pitomnik cayeron; se evacuaron casi 50.000 heridos. Pero la Luftwaffe recibió un golpe de nockout, perdieron 500 aviones de todo tipo.
Ahh, y de esas escasas toneladas, muchas veces eran cosas innecesarias: medallas o preservativos. Imaginen los insultos en alemán que gritaban los soldados del 6° Ejército al ver estos cargamentos.


Resumiendo el puente aéreo fue un fracaso debido a una serie de errores, basados en el optimismo abusivo de muchos generales, en la búsqueda de la estima del Führer por parte de Goering, que había perdido terreno con las malas actuaciones de la Luftwaffe en Dunkerque y la batalla de Inglaterra. En la timidez y sumisión (por no decir cobardía) de algunos generales en no informar a Hitler y tomar las medidas necesarias. Esta suma de egos, poca profesionalidad y en la búsqueda de reivindicación personal, ayudó a condenar la suerte del 6° Ejército.




FUENTE:

https://www.facebook.com/GeneralInviernoww2/photos/a.103202941918233/256946803210512/

General Invierno























 





Pedro Pablo Romero Soriano PS

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