13 de febrero de 1945: Bombardeo de Dresde

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Unos mil aviones pertenecientes a las fuerzas aéreas estadounidense y británica bombardearon la ciudad de Dresde entre el 13 y el 14 de febrero de 1945, causando miles de bajas civiles (entre 20.000 y 45.000 personas) y destruyendo hasta los cimientos la que había sido considerada una de las ciudades más bellas de Alemania

Dresde contaba con hermosos edificios barrocos y el impresionante palacio de Zwinger, que albergaba la famosa colección de porcelanas de Meissen y de Dresde. También se podían visitar magníficos museos de todo tipo como la Pinacoteca de los Maestros Antiguos, el Museo Histórico con su imponente colección de armas y los Salones de Ciencias Físicas y Matemáticas. Todo ello quedó reducido a cenizas

Vista general de la ciudad de Dresde destruida después de los ataques con bombas aliadas del 13 y 14 de febrero de 1945

La segunda oleada de ataques sobre Dresde se inició a las 01:23 de la madrugada. Sin electricidad, las sirenas se tuvieron que manipular de forma manual. A esa hora el incendio de la ciudad era tan pavoroso que podía verse a cien kilometros de distancia; la columna de humo se levantaba a 4.600 metros. Las operaciones de extinción tuvieron que ser paralizadas y las altas temperaturas derritieron el vidirio y el metal. Los habitantes de la ciudad murieron calcinados, a causa de un shock térmico y asfixiados en los refugios por los gases de la combustión o por la falta de oxígeno

En el catálogo de horrores que acumuló la Segunda Guerra Mundial, el bombardeo de la ciudad alemana de Dresde, ocurrido en la noche del 13 de febrero de 1945, tiene el poder simbólico de los pasajes que señalan los límites de la barbarie humana, como si resultara imposible ir más allá ni concebir mayor infamia. En la contienda hubo otros ataques aéreos con más víctimas mortales y mayor uso de explosivos, pero el de Dresde conserva en la conciencia de Europa el recordatorio del espanto que nunca debería volver a repetirse. Por la intensidad de fuego que cayó del cielo en tan poco tiempo, por las dantescas escenas de pánico y muerte que relataron los supervivientes y por la destrucción que causó en una de las ciudades más bellas y cultas del continente, conocida como la Florencia del Elba.
También, porque en esta ocasión los bestias, por emplear la expresión que usó Churchill para referirse a esta terrible página de la guerra, fueron los buenos, si es que en una guerra hay buenos aparte de las víctimas inocentes

Los ataques aéreos de Dresde llevados a cabo por EEUU y Gran Bretaña resultaron ser los más crueles en toda la Segunda Guerra Mundial. El área de destrucción total fue cuatro veces mayor que la de Nagasaki tras el bombardeo nuclear estadounidense del 9 de agosto de 1945

La ciudad quedó en ruinas, se destruyeron entre un 75 a un 80% de los edificios. Entre las pérdidas culturales irremplazables se encuentran las antiguas iglesias de Frauenkirche, Hofkirche, la famosa Ópera y el mundialmente conocido conjunto arquitectónico de Zwinger

Los residentes mayores de Dresde, Alemania, colaboran para ayudar a limpiar los escombros después del bombardeo aliado del 13 al 15 de febrero de 1945. "Operación Trueno"













Recordado como uno de los episodios más negros del final de la Segunda Guerra Mundial, el bombardeo de la localidad alemana de Dresde, una ciudad conocida como la Florencia del Elba, llevado a cabo entre el 13 y el 14 de febrero de 1945 por la aviación aliada (británicos y estadounidenses), supuso la muerte de entre 20.000 y 45.000 personas. Unos mil aviones sobrevolaron Dresde, destruyendo hasta los cimientos una ciudad que, hasta aquel momento, no había sido considerada una plaza con especial valor estratégico.





FUENTES:
https://www.facebook.com/photo/?fbid=5797649196950797&set=pcb.1289233004961180
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Fuentes:































Pedro Pablo Romero Soriano PS

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