Las defensas de Ternopol

0

Frente Oriental, cerco final de Ternopol, 24 de marzo de 1944: la defensa a ultranza del Ejército alemán


El 10 de marzo de 1944, Hitler emitió un "Führerbefehl" declarando a Ternopol una "plaza fortificada". No se podía hablar de construcción de fortificaciones, ni siquiera de sectores con fortificaciones. Un anillo interior y exterior de fortificaciones con fuertes e individuales edificaciones, con amplios campos de obstáculos y zanjas antitanque, con búnkeres de concreto sostenidos por trincheras profundas y posiciones de campo, y una fortaleza central con ciudadela y casamatas a prueba de bombas, cuarteles y hospital: todo esto no existía, al igual que depósitos llenos de municiones, pertrechos y raciones, un aeródromo, etc. Además, Ternopol carecía de cohesión, de una guarnición poderosa y bien armada.
Las defensas de Ternopol consistían en un delgado anillo de posiciones de campo dentro de un área de dos a radio de tres kilómetros del centro de la ciudad. Las tropas que operaban este sistema de trincheras y puntos fuertes carecían de municiones suficientes, especialmente para la artillería ligera y armamento pesado, material de primeros auxilios, artillería y cañones antiaéreos; ni siquiera había una pista de aterrizaje para aviones.

En la tarde del 23 de marzo de 1944, la "plaza fortificada" de Ternopol quedó aislada una vez más y, esta vez, a unos 20 kilómetros del nuevo frente alemán, quedó rodeada definitivamente. Si la guarnición alemana de Ternopol, que había combatido con eficacia, creía que la ciudad sería abandonada a medida que el frente alemán se replegaba ante el abrumador avance soviético, se había engañado a sí misma. El nuevo comandante de la ciudad, el general von Neindorf, comprendió que la ciudad no podría mantenerse por mucho tiempo por las razones expuestas anteriormente. Von Neindorf señaló en repetidas ocasiones que Ternopol no había sido fortificada para la defensa, contaba con una guarnición débil y carecía de suministros; sin embargo, la Orden del Führer del 10 de marzo se mantuvo firme: ¡la "plaza fortificada" debía ser defendida y resistir hasta el último hombre! Los defensores se prepararon para defender la ciudad, que estaba dividida en los sectores norte, sur, este y oeste, el de la orilla oeste del Seret, que abarcaba los suburbios de Kutkowce y Zagrobela. Las tropas comenzaron a establecer posiciones defensivas, se colocaron los cañones pesados, se establecieron puestos de observación y los pocos cañones se trasladaron a posiciones desde las que podían disparar en todas direcciones, mientras que la pequeña fuerza de cañones de asalto se mantuvo en reserva para contraataques. 
El cuartel general de la guarnición se puso a trabajar organizando la distribución de raciones y municiones, estableciendo líneas de comunicación y establecieron puntos de concentración para los heridos, así como compañías de alerta y reservas limitadas. El único contacto con el exterior era por radio. No quedaba mucho tiempo: el 23 de marzo, incluso antes de que la ciudad estuviera completamente rodeada, los soviéticos reanudaron sus ataques sobre Ternopol a mayor escala. Sin embargo, estos ataques con apoyo de tanques desde el norte, el este y el sur fueron repelidos.
El 24 de marzo, los soviéticos lanzaron repetidos ataques al oeste, al otro lado del Seret, contra Kutkowce y Zagrobela. El suburbio de Kutkowce se perdió, pero Zagrobela, que cambió de manos varias veces durante el día, estaba firmemente en manos de los defensores al caer la noche. Al mismo tiempo, los defensores se vieron obligados a hacer frente a nuevos asaltos desde el norte y el sur en la orilla este del río. Por primera vez, un parlamentario soviético apareció, proponiendo la rendición de la ciudad y sus defensores. La oferta fue rechazada. Al anochecer de ese día, cuatro divisiones de fusileros soviéticas, reforzadas con tanques, artillería y baterías de lanzacohetes, habían rodeado completamente la "plaza fortificada" de Ternopol.


FUENTES:
Crónica Militar y Política de la Segunda Guerra Mundial 

Fuentes: 
“Ostfront 1944 - The German Defensive Battles on the Russian Front 1944” de Alex Buchner (1944)
“The Wehrmacht’s Last Stand: the German Campaigns of 1944–1945” de Robert Citino (2017)


 


















Pedro Pablo Romero Soriano PS 

Entradas que pueden interesarte

Sin comentarios