"Éramos jóvenes, fuertes, y llevábamos cuatro años sin mujeres. Así que intentábamos atrapar a las alemanas y... Diez hombres violaron a una sola chica. No había suficientes mujeres; toda la población huía del Ejército Rojo. Así que tuvimos que tomar a niñas de doce o trece años. Si lloraban, les poníamos algo en la boca. Nos parecía divertido. Ahora no puedo entender cómo lo hice. Un chico de una buena familia... Pero ese era yo."
Este testimonio, tomado del libro La guerra no tiene rostro de mujer (1983), de la escritora bielorrusa
Svetlana Alexievich, muestra cómo la guerra deshumaniza, convirtiendo a personas comunes en perpetradores de actos inimaginables que no harían en la vida civil.
A través de cientos de entrevistas a veteranos/as del Ejército Rojo, la autora Alexievich intenta reconstruir una historia profundamente humana, llena de miedo, sacrificio y dolor.
La escritora es pacifista por convicción , por lo que uno de los objetivos que se fijó al escribir el libro fue retratar la guerra principalmente como lo que es, asesinato, injusticia y violencia desmedida.
En 2015, la prestigiosa escritora Svetlana Alexievich, hija de un soldado bielorruso del Ejército Rojo que luchó en la Segunda Guerra Mundial, fue galardonada con el Premio Nobel de Literatura. Aleksievich ha mencionado en entrevistas que su infancia estuvo marcada por las duras historias de guerra que contaban su padre y otros veteranos, las cuales influyeron profundamente en su sensibilidad narrativa y a retratar la guerra como lo que realmente es.
FUENTES:
Soldados de la Segunda Guerra Mundial
World War
Pedro Pablo Romero Soriano PS