Cañón alemán de 210 mm, sobre cureña ferroviaria. Estás piezas podían bombardear Inglaterra desde sus posiciones de Francia
La artillería alemana, cuya filosofía de uso de los cañones era que éstos debían apoyar a la infantería de una forma directa (pero siempre se asociaba su capacidad de ataque a la de tanques e infantería), estaba muy basada en unidades que acompañaban a las propias tropas, aunque también contaban con secciones artilleras pero sin llegar a los niveles de otros países como Rusia. Se tendía a asociar batallones de artillería a los regimientos, y cuando se hizo evidente la necesidad de ataque masivos artilleros éstos se delegaron en morteros pesados y artillería de cohetes en lugar de crear unidades artilleras especiales (tampoco Alemania había fabricado cañones lo suficientemente grandes para ésta tarea) Éstos ataques de saturación tenían, por tanto, una precisión bastante baja.
No obstante, los alemanes consideraban al batallón como unidad de disparo, y sólo se dividían en baterías en casos muy específicos, como cuando se trataba de dar protección a los flancos del ataque de un batallón de infantería. Tampoco se empleaban cañónes aislados para fuego directo.
El método de uso estaba directamente derivdo de la Primera Guerra Mundial y no tenía en cuenta el uso de la radio de campaña. La batería artillera se colocaba en una zona que le porporcionase una cobertura adecuada. Desde allí, un observador se adelantaba tendiendo un hilo telefónico entre la batería y el que sería su puesto de observación (se desarrollaron unidades móviles especiales para llevar a cabo ésta labor como tanques modificados y variantes de semiorugas).
En ese punto el observador calculaba los datos de angulación y distancia cuidadosamente, esperando el momento oportuno de disparo. Cuando éste llegaba, telefoneaba a la batería y transmitía los datos precisos.Ya en la batería, se empleaban las tablas y máquinas sumadoras mecánicas para hacer las conversiones y correcciones por factores ambientales como la humedad, y mecánicos como el tipo de munición. Cada cañón se ajustaba de acuerdo a las cifras obtenidas y se procedía al disparo.
Una vez localizado el punto de impacto, se procedía a la correción del tiro, que era sencilla para distancias inferiores a 500 metros, pero bastante compilcada a distancias superiores. El objetivo principal era neutralizar las unidades potencialmente peligrosas como los tanques y posiciones AT, más que el ataque directo a las tropas enemigas.
Las armas empleadas como artillería eron los obuses de 105 y 155 mm (y el temible cañón de 155 mm); mientras que cañones de 75 mm y 105 mm se empleaban como armas de apoyo directo a la infantería, ya fuera con piezas de campo o autopropulsadas (StuG, SiG 33 auf Pz I).
Cañón antitanque o antiaéreo de 88 mm FLAK Mod 18/36 /37.
El cañón de 88 mm Flak 18/36/37/41 fue una pieza de artillería alemana, famosa durante la Segunda Guerra Mundial. Usada tanto para la defensa antiaérea como cañón antitanque, fue gracias a este segundo papel que consiguió su fama, a causa de su letal efectividad, ya que podía penetrar el blindaje (100 mm) de cualquier carro a grandes distancias, fue efectiva contra los tanques pesados soviéticos KV-1 y KV-2. El modelo Pak 43, por ejemplo, podía penetrar 167 mm de blindaje a 1.000 m. Era conocido por los alemanes como Acht-Acht (Ocho-ocho).
El Flak 30 (Flugabwehrkanone 30) y la mejora de Fuego antiaéreo 38 fueron de 20 mm cañones anti-aéreos ampliamente utilizado por las fuerzas alemanas diversos en toda la Segunda Guerra Mundial . Fue el principal antiaéreas ligeras pistola alemana y fue producido en una variedad de modelos, en particular el Flakvierling 38 que combinó cuatro FlaK 38’s en un solo carro.
CAÑÓN ANTITANQUE DE 36 MMS.
Entró en las cadenas de producción en 1933 manteniéndose en ellas hasta 1941. El diseño resultó atractivo y fue copiado por los Estados Unidos, Japón, Italia, Holanda y Rusia donde sería sustituido a partir de 1942 por el cañón de 45 mm Mod.1942.
Fue utilizado profusamente en la primera etapa del conflicto y no fue hasta la invasión de Francia donde dio muestras de sus carencias a la hora de enfrentarse a vehículos con blindaje más grueso. El pequeño cañón anticarro fue fabricado por Rheinmetall-Borsig resultando una pieza ligera, tan solo pesaba 432 Kg, con un par de neumáticos para su transporte y un escudo blindado para proteger a la dotación de 4 mm de espesor, suficiente para el fuego de fusilería y metralla. Su capacidad de perforación se limitaba a tan sólo 48 mm de blindaje a 500 metros de distancia. El arma podía disparar con una cadencia muy rápida, hasta 15 disparos por minuto.
FUENTES y Bibliografía:
M. Christian Ortner: Die österreichisch-ungarische Artillerie von 1867 bis 1918. Technik, Organisation und Kampfverfahren. Verlag Militaria, Wien 2007, ISBN 978-3-902526-12-0.
Patrick d’Arcy: Versuch einer Theorie der Artillerie. Dresden 1766 (Digitalisat)
Franz Kosar: Artillerie im 20. Jahrhundert. Bernard und Graefe, Bonn 2004, ISBN 3-7637-6249-3.
Hans Mehl: Schiffs- und Küstenartillerie: Marinegeschütze aus 500 Jahren. Verlag Mittler, Hamburg 2001, ISBN 3-8132-0774-9.
Martin Guddat: Kanoniere, Bombardiere, Pontoniere: die Artillerie Friedrichs des Grossen. Mittler Verlag, Bonn 2001, ISBN 3-8132-0383-2.
Terry Gander, Hans Joachim Zurek: Artillerie heute. Podzun-Pallas-Verlag, Friedberg 1990, ISBN 3-7909-0405-8.
Carl von Decker: Versuch einer Geschichte des Geschützwesens und der Artillerie in Europa, von ihrem Ursprunge bis auf die gegenwärtigen Zeiten. LTR-Verlag, Wiesbaden 1981, ISBN 3-88706-027-X.
Georg Ortenburg: Waffe und Waffengebrauch im Zeitalter der Einigungskriege. Bernard und Graefe Verlag, Koblenz 1990, ISBN 3-7637-5809-7.
Hans-Georg Krause: 50 Jahre (1958-2008) Panzerartilleriebataillon 215. Verlag Augustdorfer-Militaerliteratur, Augustdorf 2009, ISBN 978-3-00-027808-2.
Hans-Georg Krause: Die Beobachtungsabteilung 6 : 1936 – 1945 ; vom Anfang in Lemgo bis zum Ende im Nirgendwo an der Weichsel Verlag Augustdorfer-Militaerliteratur, Augustdorf 2009, ISBN 978-3-00-029231-6.
Karl Windthorst: Das Mindensche Feldartillerie-Regiment Nr. 58 im Weltkriege 1914–1918. Dortmund, 1930.
Reinhard Scholzen: Heeresaufklärung. Motorbuch-Verlag, Stuttgart 2012. ISBN 978-3-613-03408-2.
https://elrincondeschlosser.wordpress.com/2017/01/12/deutsche-artillerie-artilleria-alemana/
Pedro Pablo Romero Soriano PS